El extravagante multimillonario dueño de Tesla, Elon Musk, después de polémicas negociaciones, compró la red social Twitter por 44.000 millones de dólares.
El plan original de Musk era simple y noble, desaparecer todas las cuentas falsas y “bots” de la red social, pero al darse cuenta de que el 20% de los usuarios en la plataforma son “bots” y cuentas falsas, la solución de Musk es eliminar la red social por completo.
Twitter nació en 2006 como una nueva alternativa de convivencia en la red. La plataforma servía como diario personal, pero rápidamente se convirtió en la plataforma de noticias y discusión política por excelencia, encabezó la revolución mediática que sufrieron los medios de comunicación.
En las últimas horas, miles de empleados han renunciado a su trabajo dentro de la red social. Muchos inconformes con las amenazas y nuevas políticas se impondrán con la llegada del nuevo dueño.
“Trabajen duro o abandonen la empresa” declaraba Musk hace unos días al adquirir la empresa. El día de ayer, en su cuenta personal, Elon posteó un “meme” anunciando la muerte de la plataforma.
— Elon Musk (@elonmusk) November 18, 2022
Las reacciones no esperaron y empleados de las oficinas en San Francisco renunciaron sin antes dejarle un potente mensaje:
“Parásito supremo, petulante, beneficiario del apartheid, oligarca, besaculos de directores, colonizador, racista”.
https://twitter.com/tania__rd/status/1593446719328382977?s=20&t=dKde4wUZQLzaAVV262W36A
¿Qué sucederá con la red social? ¿Podrá cumplir Musk con el cambio que prometió, o lo mejor para todos será que la red social sea eliminada por completo?.
