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CAMPAÑAS NEGRAS Y CONSULTORES POLÍTICOS

Niccolò Machiavelli nello studio, Stefano Ussi, 1894

Sin que haya un referente exacto de cuando surgen, las “campañas negras” o “guerra sucia”, se remontan a muchos años atrás, algunos apuntan a las elecciones de 1828 como el primer caso en donde se emplea esta práctica.

En aquel entonces los Partidos estadounidenses: Demócrata y Republicano, en busca de la silla presidencial convirtieron la campaña, literalmente, en un ambiente de violencia política, donde la difamación y el ataque personal, eran los nodales de la plataforma electoral. Todo indicó que Andrew Jackson sembró más lodo y en su hostilidad política, finalmente logró vencer a Jhon Adams y a los republicanos.

¿QUÉ SON?

Aunque existen varias acepciones acerca de este término, en un artículo publicado por Forbes México en 2017 y escrito por Margarita Vega, describe de manera sencilla a las “campañas negras” como: “estrategias electorales que tienen por objetivo atacar a los candidatos mejor posicionados en las encuestas, para restarles simpatías y, por oposición, beneficiar a sus adversarios”.

En este mismo artículo destaca algunos elementos que las componen: “No suelen ser firmadas por sus creadores; deben ser impactantes y mover emociones; al tiempo que difunden información negativa sobre el candidato en la mira”.

Esta autoría intelectual a la que refiere Margarita Vega en el primero de los elementos antes mencionados, abre la interrogante no solo de quien esta atrás y como opera. ¿Te has preguntado cuánto gana ese experto anónimo en ensuciar las contiendas y limpiar la imagen de su candidato?

Para empezar, ellos tienen un nombre, “consultores políticos”, ¿Te suena? Son los mismos que muchas veces acarrean los Institutos Políticos en los procesos electorales locales por su renombre y a quienes les cuelgan la victoria, dejando de

lado el trabajo y aportaciones hechas en casa, ¿malinchismo? Eso habrá que plantearse en otra colaboración. Mientras tanto volvamos al tema que nos atañe.

Aunque existen diversos factores para determinar el sueldo del “consultor”, Daniel Esquivel, fundador del portal “Maquiavelo & Freud”, en su artículo ¿Cuánto cobra un consultor político? Expone que se cobra en función del consultor mismo, por su prestigio pues. Revisemos el siguiente cuadro.

SUELDOS DE LOS CONSULTORES SEGÚN MAQUIAVELO & FREUD

CONSULTOR DE PRESTIGIO: Percibe aproximadamente US$ 500.000

(quinientos mil dólares) equivalentes a 10 mdp.

CONSULTOR INTERNACIONAL: Ganan aproximadamente US$ 300.000

(trescientos mil dólares) equivalente a 6 mdp.

CONSULTOR DE RECONOCIMIENTO NACIONAL: US$ 100.000 (cien mil dólares) equivalente a 2 mdp.

Seguramente las cifras distan mucho de lo que habías pensado. Y aunque las cifras parecen exorbitantes o exageradas, la inversión forma parte de la ruta crítica en la distribución de los recursos en cada campaña política.

Aunque algunos expertos mencionan que la mejor repartición del presupuesto en una campaña electoral es: empleando el 55 por ciento en publicidad; 30% para logística; 5 % para incidencias; y el 10% para especialistas, hay quienes invierten la mayor parte de su capital en éstos últimos.

Una de las practicas más frecuentes de los “consultores políticos” en esta “guerra sucia del poder”, a propósito de la “libertad” con la que se puede obrar en el canal millennial (redes sociales) es, la generación de perfiles falsos o páginas apócrifas, un hecho que exhibe la carencia o desconocimiento del manejo de crisis, pero que en esa ignorancia ha sabido venderse como la solución adecuada a un problema mayúsculo que ayudará a bajar puntos al adversario.

Otra estrategia utilizada son las famosas “Push polls”, que intentan mediante un método de promoción política, empujar a su candidato para acrecentar los puntos de simpatía electorera, un ejemplo de este método sería si en un medio de circulación local apareciera, ¿Sabías que la campaña del candidato “X” está financiada por el crimen organizado? Además de sembrar la duda de si es o no cierta la incógnita, pensarás dos veces si le otorgas la confianza o no con tu voto a alguien que está vinculado con el tema más áspero en México. Otro ejemplo de este método, son las famosas llamadas en la madrugada donde en una grabación promueven a “x” candidato. Estarás de acuerdo que esto no solo resulta molesto, si en algún momento pensaste en darle tu voto, ahora resultaras odiando a la persona por el enfado que te ocasionó, suficiente para restarle puntos al candidato contrincante.

Lo cierto es que, derivada de una línea estratégica o producto de la ocurrencia para aprovechar alguna incidencia, las campañas negras inciden definitivamente en los resultados de los procesos electorales y son el entretenimiento social en esta estadía.

José Ernesto Duarte expresaba que, las campañas negras evidenciaban la falta de propuestas de los candidatos pues, “relegan el debate y en su lugar colocan la descalificación”; mientras que los consultores políticos afirman que, “si no tienes nada malo que decir de tu contrincante, mejor cédele el lugar de una vez”.

Tú, ¿Con cuál te quedas? O quizá pienses que lo dicho por Napoleón sea el canal más adecuado para continuar con la estrategia de tu candidato, “a veces, no importa si hablan bien o hablan mal de alguien, mientras hablen”.

Nos leemos la próxima semana.

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