Raúl Carballeda
¡Ah jijo! Pues el pasado viernes se supo la noticia: la Universidad Nacional Autónoma de México se quedó sin internet. ¿La causa?, la Secretaría de Comunicaciones dio por terminado el contrato con el proveedor y ¡zas! apenas van a hacer el concurso para elegir a otra compañía. Mientras tanto, los pumas tendrán que suspender todas sus investigaciones, los maestros y alumnos tendrán problemas para sus estudios y para qué le sigo. ¿Cómo quieren que se apoye a esta transformación de cuarta en la que pululan los ineptos, los sin conocimientos, los elegidos del tlatoani? Seguramente los involucrados en estos quehaceres, no tienen la menor idea de lo que la tecnología representa. A lo mejor Jiménez Spriú se quedó en la era del ábaco, la regla de cálculo y la máquina de escribir. Ya deberíamos decir: ¡Basta!
El que pierde los estribos, pierde la cabeza y azota, o no se endereza
¡Ah jijo! Y ahora resulta que durante una reciente gira del cabecita de cebolla, al llegar al hotel donde pernoctaría, un grupo de ciudadanos, por cierto en forma por demás decente, le pidieron ayuda para solucionar sus problemas. El folclórico se enojó y les respondió que: “¿por qué intervenían en su intimidad?”. En qué quedamos ¿Ya no es el pueblo sabio al que escucha?
Diez ladrones y diez alguaciles, veinte hombres viles
¡Ah jijo! En junio del 2018, Peña Nieto entregó a Romero Deschamps 350 millones de pesos en el Convenio 10970 en su clausula 251, según esto para gastos administrativos y de operación y mantenimiento, como apoyo adicional a los cien millones anuales que ya se recibía para gastos de administración. La verdad, esto no debe sorprender a nadie pues siempre fue práctica común engordar el bolsillo del dirigente sindical para mantener controlado al sindicato y asegurar el voto para el tricolor. Además, dicha cantidad es pequeña si la comparamos con los siete mil millones que se dieron al líder en cuestión, para asegurar el voto en la campaña presidencial del candidato tricolor de hace unos pocos años. La ordeña de Pemex por parte del sindicato debe acabarse. ¿Cuánto dinero le habrán reservado en 2019, para silenciar las protestas por la falta de medicamentos, de especialistas y de servicios de laboratorio, que afectan a jubilados y activos que son atendidos en servicios subrogados y también a los que asisten a los hospitales de Picacho y Tezozomoc?
A chillido de marrano, oído de carnicero
¡Ah jijo! Pues ahora resulta que el jefe del Ejecutivo está decepcionado de la prensa o de los medios y con lágrimas en los ojos les dijo en su mañanera, que no lo apoyan, que la prensa de los siglos XIX y XX si apoyaban al presidente en turno, cosa que no es cierta. Una cosa es apoyar las pejejadas y otra la crítica constructiva que hagan los medios para centrar al Ejecutivo cuando enloquece y sólo acepta a los periodistas no “fifís” que le hacen la barba.
¿Quién será el que le ponga el cascabel al gato?