Cada día está más cerca la época del año que muchos esperamos, algunos para estar en casa, otros para incrementar sus ventas, algunos más para reencontrarse con personas que no vieron en el año, pero cual sea el motivo, éste puede opacarse cuando ocurre un accidente, y el fuego, es algo en lo que no pensamos, hasta que está presente.
Hay costumbres que nos llevan a malas prácticas y en realidad la prevención es la mejor opción, aquí, algunas recomendaciones:
Primeramente, debemos estar al pendiente de nuestras instalaciones eléctricas en casa, ya sea que, por daños previos, errores en la instalación, excesos de luces navideñas o sobrecargas en los multi contactos, pueden ser el primer y más importante factor de riesgo, el cual podemos mitigar fácilmente:
Evite comprar luces navideñas y adornos de dudosa procedencia, ya que seguramente carecerán de toda certificación de seguridad, aunque su precio sea más bajo.
Si aún conserva luces de foco incandescente, le sugerimos cambiarlas por luces LED, son más seguras y consumen menos energía.
Si tiene usted ya tiene un árbol de navidad natural, procure que no se seque, rocíelo constantemente con un atomizador para que no constituya un riesgo en sí mismo.
Evite a toda costa que sus adornos navideños, regalos o lo que sea, obstruyan las salidas, así como que estén fuera del radio de cualquier fuente de calor.
Aunque sus luces navideñas, sean de buena calidad, si los cables están desgastados o enredados, reducirán su seguridad.
Evite tener fuentes de calor cerca de objetos que puedan encenderse fácilmente, las velas se ven muy bien en la mesa, pero si no somos cuidadosos, puede causar un grave accidente.
Y recuerde que nunca deben dejarse desatendidas y asegúrese de apagarlas al salir de casa o irse a dormir.
Para adornos exteriores, utilice sólo luces y decoraciones que permitan su uso en exterior, así como que estén alejadas de zonas de riego.
Apague todas las luces y adornos cuando vaya a salir de casa o al irse a descansar.
Y como extra, extreme precauciones en la cocina, revise que no exista acumulación de grasa en la campana extractora que pueda incendiarse, esté al pendiente de evitar que se genere una acumulación de gas en el horno y tenga cuidado para manejar líquidos calientes, NO PERMITA QUE LOS NIÑOS ENTREN CUANDO ESTÉ USTED COCINANDO, y NUNCA DEJE LA COCINA SIN SUPERVISIÓN CUANDO HAYA NIÑOS PEQUEÑOS EN CASA, una quemadura en un niño es algo que nadie desea, por tanto, NO SE CONFÍE y por último, siempre mantenga el piso limpio de grasas que pueda provocar un accidente grave por caída.