Jorge Luis Ramos Ramírez
Durante el segundo encuentro de jóvenes de Maestros por México (Grupo formado por la “lideresa”) celebrado en Cholula, Puebla, la maestra Elba Esther Gordillo calificó los esfuerzos de AMLO por mejorar la educación en México como una reformita, asegurando que los derechos de las y los profesores seguirán siendo violentados debido a que no hay nadie que vea por sus intereses tal y como ella lo hizo por mucho tiempo.
Además de arremeter en contra del presidente de la república, la “maestra” y no precisamente Laurita Garza, se fue en contra de los representantes sindicales actuales y reprobó el frágil y débil posicionamiento del SNTE respecto a la reforma que se propone desde el ejecutivo y que según Gordillo no cumple con las promesas hechas durante la campaña y aseveró que solamente la coordinadora está haciendo algo para modificar y exigir el respeto a los derechos magisteriales aunque sea de una forma muy radical.
Para finalizar su discurso Elba Esther amenazó con volver a la presidencia del SNTE con la firme convicción de hacer valer y respetar los derechos de las y los profesores que se perdieron durante la reforma del 2013, situación que además a ella le hizo ganar un auto, pero de formal prisión bajo los cargos de enriquecimiento ilícito a costillas de aquellos que defendió con tanto ahínco, millones que curiosamente después de la victoria aplastante de MORENA, se dijo que fueron producto del trabajo de su madre y que le dejó como herencia, será acaso que con este desafío ¿ya se rompió la relación AMLO-Gordillo?
En respuesta a todas las descalificaciones emitidas por Gordillo, el presidente de la república en sus ya tradicionales “mañaneras” dijo que la maestra, al igual que todos los docentes de México tienen el derecho a expresar sus inconformidades pero que lo que no se vale es que alguien quiera sacar raja de ver si cumplen o no cumplen y como comúnmente se dice hacer leña del árbol caído. Respecto a la presidencia del SNTE el presidente afirmó que se promoverá la democracia y que el ya tiene reservado un lugar en primera fila para ver cómo las maestras y los maestros de México eligen a sus nuevos líderes sindicales.
Entonces ¿Es posible el regreso de Elba Esther a la presidencia del SNTE? Claro que lo es, debido a que AMLO promueve la democracia sindical y que haya elecciones para la presidencia del sindicato de forma libre y secreta, es decir que seremos los mismos profes quienes nos echaremos la soga al cuello respecto a quien llevará las riendas del sindicato más grande de América Latina para que defienda nuestros derechos o sea una pieza servil para el gobierno actual. Así que el regreso de gordillo dependerá de la memoria o la desesperación que tengamos como gremio.
La estrategia de la maestra Elba Esther es clara, estar en contra de todos y a favor de ella, al hacer que los docentes nos enfoquemos en los “culpables” de nuestras desgracias (SNTE y el gobierno) y ofrecer que regrese la antigua gloria del sindicato bajo su mando y retomar su trono como presidenta vitalicia del mismo.
¿Representa una amenaza para el gobierno y su reforma? Realmente no, en la misma mañanera el mandatario federal declaró que no piensa desgastarse, por lo que de no llegar a un acuerdo con la Coordinadora y con los docentes de México girará instrucciones para que todo vuelva a ser como antes de la reforma de 2013 de Enrique Peña, lo cual sin duda a pesar de ser un paso hacia atrás en la modernidad de la educación dejaría en claro quién es el que manda en esta relación.
Por lo pronto como profesores no nos queda más que esperar a que el poder legislativo pueda sesionar y aprobar la “reformita” de AMLO en materia educativa, además de estar al pendiente de la futura elección de la presidencia del SNTE y tener memoria histórica para elegir sabiamente a quien tomará las riendas de la que debe ser la contraparte del gobierno en materia educativa.